martes, 11 de noviembre de 2014

LA LOCOMOTORA FANTASMA(cuento)

   El pequeño pueblo de aproximadamente 2500 habitantes, dos calles cortadas por las vías del ferrocarril y la estación de trenes, parecía el apéndice de la geografía de los diferentes pueblitos. allí escondido frente a la ribera del río Calbuco era como el último suspiro de la civilización. El pueblo, callado y lleno de ojos atisbando por las ventanas y rendijas de las puertas, muchas veces le daba sensación de soledad y vacío, solo las sirenas de las dos fábricas que eran el eje que daba vida rompían el silencio al medio día, hora en que los obreros dejaban sus faenas para ir a almorzar.
   Luego todo era monotonía, solo cuando se pasaba por una de las dos escuelas existentes se podía escuchar el bullicio y la risa de los niños que alborotaban el aire con sus juegos y travesuras, esto se acentuaba más en la época invernal donde se oscurece más temprano y el frío del sur cala hondo en los huesos. Allí había solo dos iglesias:  una católica y ota pentecostal, en las que se concentraban los habitantes que practicaban el cristianismo. Los dueños de las tres tiendas existentes en el pueblo eran turcos y judíos,
a otros comerciantes también les decían judíos, pero porque vendían muy caras sus mercancías, en todo caso el pueblo era pintoresco, sobretodo cuando celebraban las fiestas, como la noche de San Juan, la Cruz de Mayo, Las fiestas Patrias del 18 de Septiembre, Navidad y Año Nuevo. Para la noche de San Juan, todos hacían diferentes pruebas: papeles manchados con tinta, papas a medio pelar, pararse frente al espejo, la espera debajo de la higuera, etc. Al día siguiente grandes y chicos salían a contar el resultado de sus acertijos; pero el día de la Cruz de Mayo, cerraban una de las calles principales cuyo nombre era Constitución y , ponían barricas de harina llenas de papeles y todo tipo de elementos de fácil combustión en diferentes lugares y al medio un muñeco hecho con palos cruzados y paja, lo vestían con ropas de hombre, le ponían un sombrero y a  las ocho de la noche comenzaba la fiesta prendiendo fuego a las barricas y al muñeco. ¡Ardían que daba miedo! Fiestas que no se olvidan y que eran lo único que daba vida a sus habitantes.
   Aunque había algo más que llamaba la atención de aquella gente. pero espeluznante y terrorífico. Mejor será que no les cuente nada porque seguro que se van a asustar y no podrán dormir esta noche. ¡Uuuuuhaaa! ¿Les gustan los relatos de terror? Bueno, si es así, les cuento lo que pasaba en las noches en aquél pueblito misterioso de punta de rieles.  Resulta que a menudo por las noches la locomotora a carbón de piedra, hierro fundido, negra como noche de invierno. comenzaba a hacer sonar el silbato poniéndose en marcha: chiqui-chiqui-chaca-chaca, ¡uuuuuu! ¡Todo el pueblo se despertaba asustado! Acababa el ruido y se volvían a dormir. ¡Nadie se atrevia  salir a ver lo que pasaba!
   Transcurrian dos o tres días, a veces una semana y a la noche otra vez la locomotora comenzaba su bullicio de siempre, lo más extraño era que la máquina no tenía porqué hacer ruido. Estaba estacionada en el lugar de siempre, con la caldera fría, sin fuego y nadie la manipulaba. ¡Todo era tan raro que ponía los pelos de punta! Hasta los perros se asustaban poniéndose a ladrar como locos aullando lastimosamente. Para poner la locomotora en funcionamiento el maquinista debía encender el carbón, calentar los hierros y todo lo que implicaba sun antiguo funcionamiento. Pero el maquinista a esa hora estaba durmiendo junto a su esposa e hijos.
   El silencio de la noche tendió su manto sobre el pueblo cuyos habitantes dormían entregados al descanso; de pronto comenzó el sonido del silbato alertando a la gente que nuevamente la  locomotora estaba haciendo sus travesuras. La pregunta obligada era ¿como la caldera sin estar encendida dejaba escapar la presión a través del silbato y el chiqui-chiqui-chaca-chaca comenzaba con su compás de siempre dando la sensación de que la máquina se ponía en movimiento. Continuará

miércoles, 31 de julio de 2013

POEMA DEL ABISMO

He rodado hasta el fondo de la sima
arrastrando mi penuria y mis despojos.
lacerando mis carnes en la ruina
doblegando mi orgullo sobre hinojos.

Mi caída ha sido lenta y tormentosa,
fui perdiendo poco a poco la alegría.
Fui cayendo perpetua y lastimosa
hasta hundirme en el fango de agonía.

Revolcándome en el lodo cada día
pensaba mitigar tanto dolor,
y solo conseguí que mi agonía
me hundiera más y más en el horror.

Oscuridad profunda de mis huesos,
nubarrones oscuros que aprisionan,
mi mente, mis sentidos, mi embeleso,
que la fe como leones me devoran.

Decepcionada, vacía y confundida
deseando jamás salir de aquella sima.
Sino quedar para siempre adormecida
y no morder el polvo que me brindó la vida.

He rodado hasta el fondo ¡No lo niego!
revolcándome en la arena del desierto.
Me he cegado cual inicuo en desosiego
sin oír del Universo su concierto.

Arpegios y bemoles, campanas y sonidos,
estrellas y luceros, ni soles amarillos,
no quiero campos verdes, jardines florecidos,
arrullos de palomas ni aletear de pajarillos.

Estoy así muy bien en el profundo abismo,
aquí no hay sufrimiento ¡Pues todo lo he sufrido!
Sangraron mis heridas, cicatrizaron digo,
venciendo mi esperanza, mi fe y heroísmo.

Mi temple de estoicismo quebróse en mil pedazos.
mis ganas y mis fuerzas también se destrozaron.
Por eso estoy muy cómoda mirando desde abajo
la cruel hipocresía de los que me empujaron.

Tan sólo si el Maestro viniera a rescatarme,
quizás tuviera ganas de volver a levantarme.
Tomada de su mano intentaría treparme
¡A las paredes frías de éste pozo impenetrable!

Deseo que mañana dormida, al despertarme
mi rebeldía incólume pudiera abandonarme
y de cara al Maestro, desnuda al presentarme
¡Vestida con su Manto! ¡Su justicia pueda darme!

De mi libro: "EL AMOR Y LOS ESPINOS"








miércoles, 14 de septiembre de 2011

ENTRE EL HAMBRE Y EL PAN

Uno es el amor, dulce en sus momentos,
el otro es la pasión que muerde los besos;
uno es la brisa en brazos del viento
el otro recuerdo olvidado en lamento.

Uno es fuego consumiendo por dentro
el otro es escarcha, frío como témpano,
uno es un volcán encendido de fuego
el otro un glaciar impenetrable de hielo.

Uno es el hambre, y el otro es el pan,
uno es tierra arada, el otro es un trigal;
dos amores rondan mi huerto y mi frutal.
¡Uno es sólo un nombre! ¡El otro,  realidad!

miércoles, 30 de marzo de 2011

ESCLAVA Y PRISIONERA ENCADENADA

En medio del ocèano soy quietud que desespera
desde que mis hijos murieron en mi regazo;
soy la madre solitaria en la espera
de volver a tenerlos en mis brazos.

Desde entonces fueron rojas mis pisadas
por la sangfre de mis niños derramada,
me hice sorda con el tronar de las metrallas
que rompieron mis tìmpanos de plata.

¡Soy Malvinas! ¡La tierra avasallada!
¡Soy Malvinas! ¡Y de aquellos soy la esclava!
aquì mis hijos se durmieron sin mañana
y de rojo se han teñido mis entrañas.

Desde el fondo de la tierra siento el grito
de la sangre de mis hijos que me llama,
de sus voces siento el eco infinito...
¡No estàs sola madre, estàs acompañada!

¿Es que velan mis hijos en la noche,
cual vigìas en un nuevo amanecer?
¡Atalayas son los muertos sin reproches!
¡Inmolados en el hielo del poder!

¡Soy Malvinas! ¡La tierra despojada!
¡Soy esclava y prisionera encadenada!
Estoy triste y llorando en èste dìa
¡Recordando una vez màs la patria mìa!

LAS MALVINAS SON ARGENTINAS!!!!!

de mi libro: "ENTRE COPIHUES Y CEIBOS"

miércoles, 2 de febrero de 2011

¡CUANDO SE PERDIO MI NIÑA?

Entre las flores del parque busco a mi niña perdida,
la busco entre los claveles, las rosas y las espinas,
¿porqué será que mi niña se perdió por las esquinas?
¿será que nadie la vio cruzando las avenidas?

Mi niña ojitos de loba, traviesa y desvalida,
se fue enredada en los sueños sin darme su despedida;
no entendió cuánto la amaba y como esperé su regreso,
yo la busqué entre las sombras que la envolvieron de besos.

Entre la gente la busco aferrándome al recuerdo
de sus manitas pequeñas y los rizos de su pelo.
La busco de mil maneras y de ninguna la encuentro
parece que se extravió en el laberinto del tiempo.

yo busco a mi niña buena para llenarla de besos,
para decirle que vuelva y no se pierda en los espejos.
Ella me ha herido el alma y destrozado mis sueños,
hoy de tanto buscarla ni siqtuiera tengo anhelos.

Si usted ha visto a mi niña ¡Dígale que la recuerdo!
que nunca la olvidaré porque nació de mis huesos,
que cada día la espero para llenarla de besos.
¡Díganle que su madre de tanta espera se ha muerto!


DEL LIBRO "ENTRE COPIHUES Y CEIBOS"

miércoles, 12 de enero de 2011

CANCION DE AMOR

Caminemos amor bajo la lluvia,
vivamos plenamente este momento,
es regalo del cielo este amor nuestro
vivámoslo en hojas secas y recuerdos.

Caminemos el otoño gris, poético,
sobre alfombras de hojas secas y de pétalos,
que fue hecho justamente para aquellos
que se aman a pesar de los misterios.

Que se aman aunque pase mucho tiempo
y aprenden a hablar con el silencio;
enmudeciendo el aire, el universo,
deteniendo los vientos con un beso.

Caminemos amor que nada importa,
sólo el amor que el alma nos transforma;
veamos a través de las pupilas
de los ojos del amor que son sin sombras.

Quedémonos muy juntos en la brisa
esperando el nacimiento de la aurora,
esperemos bajo este árbol con caricias
el saludo enajenado de las olas.

Dedicado a Juan Manuel
Poema de mi libro EL AMOR Y LOS ESPINOS (2008)
AUTORA: María Alicia Villegas Esparza

miércoles, 5 de enero de 2011

MI ROBLE Y MI VADO

Entre tus silencios y entre mis palabras,
habrá un te quiero en mis noches largas,
siendo dulce sueño acunando mi alma
dándome descanso y la suave calma.

¿Sabes la quietud que me dan tus manos?
¡Seguridad excelsa del hombre que amo!
aún en la distancia sigues siendo vado,
mi castillo fuerte, mi roble y mi álamo.

Tú llenas mi vida ¡Oh, dulce sueño mío!
todos los rincones y todos los vacíos,
porque siempre has sido, dulce sueño mío,
mi cause, mi mar, mi océano y río.

¡Déjame que cuente al mar y a los míos!
Que siempre te he amado y por tí yo río;
porque eres el viento huracanado y tibio
¡Que mece en el árbol del amor mi nido!

DE MI LIBRO: "EL AMOR Y LOS ESPINOS"